Hola a todos,
En esta entrada quiero explorar la conexión entre cuerpo y mente, y como podemos nosotros estar mejor onectados.
Sin entrar en prácticas holísticas, esta conexión la constatamos todos los días.
Es increíble cómo la mente puede impactar en nuestro cuerpo (los ataques de ansiedad, por ejemplo, tienen síntomas físicos reales, las náuseas, pueden ser originadas por el estrés, o en sentido positivo, podemos tener un subidón de energía por una noticia feliz). De igual forma, el cuerpo puede impactar en nuestra mente, por ejemplo, la forma de respirar o de movernos afecta de una u otra manera el cómo pensamos y procesamos la información.
Cuerpo y mente se influencian mutuamente y es por ello que debemos tratarlos como una sola cosa unificada.
RESPIRACION
La respiración es nuestra herramienta interna más importante para conectar cuerpo y mente.
La respiración surge de forma involuntaria y automática, pero también podemos controlarla, realizarla de manera voluntaria y utilizarla como una herramienta para mejorar nuestra salud.
NERVIO VAGO
El nervio vago es el punto de contacto más importante entre cuerpo y mente.
Es un nervio, que como su nombre indica vaga o deambula por el cuerpo, el corazón, los pulmones, el hígado, el estómago y otros órganos.
Es un nervio fundamental para la regulación del corazón ya que mantiene el latido cardiaco bajo control. Es fundamental para tener un sistema inmune saludable, ayuda a contener la inflamación y evitar que se extienda al torrente sanguíneo.
RESPIRACION Y NERVIO VAGO
La respiración profunda (sobre todo la exhalación) fortalece y activa al nervio vago.
A mayor actividad del nervio vago, mejor es nuestra salud.
Recientemente, se han comenzado a hacer estudios al respecto, y se ha creado un índice denominado “HEART RATE VARIABILITY o HRV”
Esta variación se refiere al tiempo de intervalo entre un latido cardiaco y el siguiente (por ejemplo, 1 seg, 0,8 seg, 1,2 seg)
A mayor variabilidad en este intervalo, mayor índice HRV. A mayor índice HRV mejor estado de salud física y mental y mayor longevidad.
El estímulo parasimpático, que es el que tranquiliza el latido cardíaco, sucede a través del nervio vago.
En estados de estrés, funciona mas el sistema simpático que el parasimpático (desequilibrio autonómico), y decae la actividad del nervio vago. Si decae su actividad hay menor variabilidad del índice HRV.
Esta menor variabilidad se ha relacionado con envejecimiento prematuro, enfermedades cardiovasculares, depresión y ansiedad.
Por otro lado, la alta actividad del nervio vago se relaciona con emociones positivas, mejor estado de salud, mejor auto regulación y mejor interacción social.
En corto y simplificado: Si realizamos respiraciones profundas de manera regular, estaremos fortaleciendo nuestro nervio vago y por ende nuestra salud. Parece casi demasiado fácil y sencillo, casi demasiado bueno para ser verdad… La llave para una buena salud física y mental, la tenemos al alcance de la mano, específicamente en la punta de la nariz
Me parece increíble todos los beneficios que tiene el saber respirar y controlar nuestra respiración y que no los pongamos en marcha